zonadenoticias

miércoles, diciembre 24, 2008

Adiós


Deseo a todos unas felices fiestas de fin de año. Hoy 24 de diciembre Zona de noticias ha cumplido tres años de existencia. Para mí ha sido muy placentero realizar a lo largo de este tiempo una labor que sé ha sido útil y bien recibida por ustedes. A partir de mañana ya no actualizaré este blog. Les agradezco su acogida allá del lado de su pantalla. Los dejo con esta maravillosa puesta de sol (tomada desde El Suizo, en La Herradura), el cual sale, se oculta, muere, pero después renace y, quizá, regresa. Adiós.

Foto leyenda


Victoria Guerrero, Giancarlo Stagnaro, Luis Fernando Chueca, Domingo de Ramos y este blogger. Surco, diciembre 2008. "Feliz Navidad y próspera crisis financiera mundial" (Heduardo dixit).

martes, diciembre 23, 2008

Narrativa y poesía del 2008


La edición de hoy de Caretas 2059 incuye en su sección cultural un balance de Maribel de Paz sobre "Lo mejor y peor del mundo literario y escénico del año que termina". "La publicación literalmente más explosiva del 2008 empieza, sin duda, con la siguiente frase: 'En el cementerio de Montparnasse, a las seis de la tarde, Rachel sube a la tumba de Cesítar Vallejo y separa las rodillas'. Se trata de Bombardero, inclasificable obra del inclasificable César Gutiérrez, que registró dos ediciones en un solo año; una ya de culto y lindando con la clandestinidad, y la otra comercial y por entregas con Editorial Norma", señala. Y enseguida agrega, con gran acierto: "Menos explosiva, pero no menos trascendente fue la aparición de La iluminación de Katzuo Nakamatsu, alumbrado retorno de Augusto Higa con una historia en la que su protagonista se verá sometido a la marginación, la locura y el dolor antes de encontrar el ansiado satori en medio de parajes como Tacora, La Parada y el cerro El Pino". También son puntualmente mencionados, entre otros, Edgardo Rivera Martínez, Carlos Calderón Fajardo, José Güich y "el enigmático Siu Kam Wen (de quien se insiste en que en realidad no existe)", según escribe, a modo de broma, la periodista. Siempre dentro de la literatura, Maribel de Paz continúa su recuento esta vez en el campo del verso: "En poesía destacaron Labranda, del siempre renovador Róger Santiváñez; y el furioso e indispensable Las palabras no pueden expresar lo que yo experimenté entonces, de Oswaldo Chanove, publicado por Álbum del Universo Bakterial con textos redactados por el autor a lo largo de los últimos 25 años y del que nos quedamos con estos versos: 'Dios ama el silencio / Dios busca la inmovilidad definitiva / ¿Por qué entonces ha creado tanto alboroto?'. Y en poesía, también, Ocho cuartetas en contra del caballo de paso peruano, de Mario Montalbetti; Aves de la ciudad y alrededores, de Rafael Espinosa; Dante y Virgilio iban oscuros en la profunda noche, de Marco Martos; y Miguel Ildefonso por partida doble con Los desmoronamientos sinfónicos e Himnos; y la publicación póstuma de Mentadas de madre, de Pablo Guevara, editado por la UNMSM. Además, la publicación de la poesía completa de José Watanabe con Editorial Pre-Textos de España en coedición con Ediciones El Virrey. Y, claro, la publicación de las obras completas de Wáshington Delgado en titánica tarea de Jorge Eslava".

PD Miércoles 24: Hoy en su columna diaria de La República Augusto Álvarez Rodrich recomienda lo siguiente: "El 24 llegó quizá muy rápido y aún no ha acabado de comprar los regalos de esta noche. De repente, ni ha empezado. Tranquilo, regale un libro. Es una manera magnífica de expresar amor, y si lo compra en El Virrey, lo hará con tranquilidad y bien atendido por mi amiga Chachi Sanseviero y su equipo. A continuación, mi muy arbitraria lista de recomendaciones". En dicha lista están la Poesía completa de José Watanabe, "una gran edición integral con toda su poesía. Imprescindible", y Sueños reales de Alonso Cueto, "relatos breves y divertidos sobre la vida y obra de escritores".

PD2: Miércoles 24: Este año el ICPNA publicó Ensayos sobre Carlos Eduardo Zavaleta, prologado por Jorge Valenzuela Garcés. El libro incluye trabajos de, entre otros, Ricardo Falla, Sonia Luz Carrillo, Pilar Dughi y Augusto Higa.


En la foto: Aéreo César Gutiérrez buscando nuevas alturas luego de la publicación de Bombardero. [Leyenda de Caretas]

El hacer poético

Bajo el cuidado del conocido crítico peruano Julio Ortega y de la investigadora venezolana María Ramírez Ribes, acaba de salir de las prensas de la Universidad Veracruzana en México el sustancioso volumen El hacer poético, del cual ya diera cuenta hace casi dos años, y que contiene cien entrevistas a reconocidos poetas de España e Hispanoamérica sobre lo que constituye su marca de identidad central: precisamente, su concepción del hacer poético en tanto escritura y experiencia vital. Las entrevistas ofrecen una arte poética de cada autor y respuestas de lo más diversas, desde las muy amplias del cubano Jesús David Curbelo y del argentino Daniel Samoilovich (editor del trimestral Diario de poesía), hasta las muy breves y puntuales de la española Marta López-Luaces y del Premio Cervantes argentino Juan Gelman. Destaco de este último su respuesta a la pregunta "¿Qué papel, si alguno, le concede usted al poema entre los discursos que disputan hoy la racionalidad civil y el significado de nuestro plazo en este globo?". Gelman dice: "La poesía no se pelea con ninguna otra clase de discurso. Es. Viene del fondo de los siglos, ninguna catástrofe natural o fabricada por el hombre ha podido extinguirla y sólo desaparecerá cuando el mundo acabe". Entre los cien poetas entrevistados se encuentran Ángel González, Claribel Alegría, Rafael Cadenas, el ya mencionado Gelman, Oscar Hahn, Eugenio Montejo, Enrique Fierro, Raúl Zurita y Liliana Lukin. De los peruanos, que totalizan quince, menciono a Carlos Germán Belli, Antonio Cisneros, Rodolfo Hinostroza, José Watanabe, Róger Santiváñez, Montserrat Álvarez, Victoria Guerrero y José Antonio Mazzotti. De este último reproduzco su entrevista aquí.

En la foto: carátula del libro.

lunes, diciembre 22, 2008

Franciso Ángeles, Diego Trelles, Carlos Calderón Fajardo

"La apuesta de La línea en medio del cielo se nutre de ambigüedad. Es un mérito que la escritura del texto no se precipite en truculencias o densidades sólo para iniciados, a pesar de esa rara atmósfera de verdades a medias. A partir de tales premisas, Ángeles traza la historia de Ignat y Virginia, cuyas identidades son un misterio sin solución. La novela, en sí, se erige como enigma en cuanto a la realidad que viven los personajes; ella se intersecta permanentemente con lo irreal o con una sensación de que nada ha ocurrido: todo es ilusión o magma ficcional que busca su cauce", señaló José Guich Rodríguez a propósito de la primera novela de Francisco Ángeles ayer domingo en su columna del diario Correo. Por su parte Javier Ágreda, hoy en La República, observa en dicha obra "dos líneas narrativas [que] se complementan bien y logran integrar aspectos como el contexto político y las obsesiones personales, la acción y la reflexión, la realidad y la ficción", a la vez que sostiene que "La línea en medio del cielo presenta a Francisco Ángeles como un narrador inteligente y original, pero al que aún le falta trabajar mucho todo lo relativo al lenguaje, el elemento más importante de la obra literaria". Por otro lado, Jordi Carrión del diario ABC de España reseñó hace unas semanas la antología de Diego Trelles El futuro no es nuestro. Narradores de América Latina nacidos entre 1970 y 1980, "un muestrario exhaustivo de nuevos nombres, más allá de Bogotá 39 y de las apuestas editoriales españolas". Por último, "Montaigne y los bosques", un cuento breve de Carlos Calderón Fajardo publicado el pasado viernes en el weblog Gambito de peón de Ricardo Sumalavia, a quien el relato está dedicado.

PD Martes 23:El tramo final, primer libro de cuentos de Siu Kam Wen, publicado originalmente en 1986, será reeditado en febrero del 2009 por la editorial Casatomada, comenta el propio autor en su weblog Tierra de nadie.


En la foto: Calderón Fajardo publicó este año La noche humana, "una novela clave en su biobibliografía" en opinión de José Donayre.

domingo, diciembre 21, 2008

Bareto



El grupo musical revelación del 2008 en el Perú fue Bareto, en el vídeo realizando uno de sus homenajes a Juaneco y su combo en La Noche de Barranco, local en el que se presentará nuevamente este viernes 26. Disfruten.

sábado, diciembre 20, 2008

Elpénor. Homenaje a Josemári Recalde



Testimonio de Róger Santiváñez

Hubo una vez un tiempo dorado y ése fue el invierno limeño de 1991. Uno de aquellos mediodías dichosos me encontraba con Pamela en la terraza delantera del restaurante "El Cholo Ademar" de la Avenida Tarapacá en el rico Rímac, disfrutando de un suculento ceviche y un par de cristales. De pronto pasa caminando por la vereda Carlos Oliva y al verme se acerca a saludarme. Con él iba un joven alto y sonriente a quien Oliva me presentó como Josemári Recalde. Yo ya había oído mencionar su nombre en las noches de los bares poéticos de Quilca. Josemári conocía a Pamela (ambos estudiaban en la Católica) de modo que nos sentamos a conversar de poesía. Hablamos de Lautreamont, de Breton y los surrealistas y luego de Moro y de Westphalen. Cuando la tarde comenzaba a desplomarse, Oliva dijo: es la hora de un mixtoco y salió raudo hacia las calles donde aún se ignora la incertidumbre (Verástegui dixit). Luego de todo lo vivido, nos despedimos, ellos se fueron hacia la Avenida Alcázar (para tomar una combi) y Pamela y yo enrumbamos hacia la nave del Templo A, que se escondía en el garage de mi casa.
A partir de ese momento comencé a encontrarme con Josemári en el bar del chino Félix –sito en Quilca- al que la gente denominaba Las Rejas debido al armazón de fierro que sellaba con llave el acceso al lugar y también el Bar de los Recuerdos (Pamela por ejemplo lo llamaba así) ya que Félix inundaba la oscura noche limensi con sus innumerables cassettes de la Nueva Ola peruana de los 60s y rock and roll, desde Elvis hasta los 70s. Era un muy agradable lugar para sentarse a no hacer nada (Estar en un bar siete horas seguidas y no necesariamente tomando, como le dijo Luis Hernández a Alex Zisman en su famosa entrevista). Todas las tardes o cualquier tarde me sentaba con Josemári y pedíamos una cerveza que duraba horas, y hablábamos de poesía. Podía ser Eguren o Vallejo. Pound y Eliot. Cisneros e Hinostroza. Jorge Guillén y Pedro Salinas. Recordábamos versos y los fraseábamos. Tocábamos la vida de Dino Campana o de Juan Ojeda. Citábamos títulos de libros. Por fin llegaba Grover Gambarini (jefe del cartel de Quilca) y nos ponía un ron. Poetas tienen que tomar trago de hombres, nos decía. Y erradicaba la cerveza. Seguíamos con Alejandra Pizarnik y Sylvia Plath. Tengo que matarte papito, decía Josemári recitando a esta última y Grover se sorprendía. Ustedes están más locos que yo muchachos, espetaba y de súbito salía corriendo del bar para recibir a la musa de aquellas reuniones Nelly Gutiérrez. Entonces la dulce morena se colocaba entre nosotros y nos contaba de una nueva revista de poesía que quería publicar. Le pondré Heautontimorumenos nos explicaba y Josemári decía perfecto el atormentador de sí mismo como Baudelaire. El tiempo avanzaba implacable y aparecía el gran actor y declamador de Vallejo, Hudson Valdivia y la siguiente botella de ron no se hacía esperar. Cuando los primeros avisos luminosos reflejaban su eléctrico esplendor sobre las vitrinas, los subtes iban entrando con Montaña, Kilowat o Boui y una guitarra de palo en la mano. De pronto Juan Ramírez Ruiz se presentaba totalmente despeinado y con varios anisados adentro y si lo invitábamos a nuestra mesa, nos respondía: ¡Hoy no atiendo a provincias! y se marchaba al fondo del bar hacia la izquierda, zona oculta ya que era un segundo salón al que se llegaba por un estrecho pasadizo. Bien entrada la noche Josemári gustaba de acompañarme (te hago la taba, me decía) en mis incursiones temporales en el infierno del azul pastel (como ha escrito Dalmacia Ruiz Rosas) y hasta allí seguíamos conversando de poesía. San Juan de la Cruz y Chirinos Cúneo. Ignacio de Loyola (ambos éramos exalumnos jesuitas) Rimbaud –claro- y todo lo llevábamos al plano de la mística. Dios era un tema que apasionaba a Josemári.
Así se pasaron los años 90. Siempre nuestras citas fueron en Quilca o podríamos encontrarnos en un recital o en la presentación de un libro y ya no nos separábamos. Alguna vez también en Barranco, una de las últimas noches, pero en esta ocasión fue zanahoria, ya que yo ya había emprendido mi alejamiento de los psicoactivos. Por eso me despedí de él –después de un recital- e increíblemente lo volví a encontrar en un paradero de la Avenida Brasil, y nos volvimos a despedir. Poco después viajé a Piura para mi curación definitiva. Y nunca más volví a verlo. Cuando me enteré de su muerte y de las circunstancias en que ocurrió, pensé que Josemári Recalde, el brillante y talentosísimo joven poeta –con quien tanto quería, como dice el otro Hernández- había llegado hasta el final en esa ruta en la que habíamos volado juntos. Lo sentí realmente como un héroe -en su propuesta radical- hasta el extremo de inmolarse en plena juventud. Nos dejó su Libro del Sol donde dice: no quiero / pertenecer más a la realidad verdadera / ni a la falsa. Así es Josemári, tú ya estás en el cielo puro y especial de los auténticos poetas. Cabría decir como Ezra Pound en uno de sus Cantos: Mas el primero en llegar fue Elpénor, Elpénor nuestro amigo. Y voy a terminar esta nota, con una cita que a él le hubiera encantado –sin decir de quién es- como una kábula y una oración: Dios ponga cabe a nuestras lágrimas.

Filadelfia, 17 de noviembre de 2005


En la foto: diseño de carátula de Libro del Sol realizado por el propio Recalde (Lima, 1973-2000). Vaya este homenaje a ocho años de su partida. El presente texto debió aparecer en la revista Odumodneurtse 6, que nunca llegó a editarse. Agradezco a Luis Fernando Chueca.

viernes, diciembre 19, 2008

Performance de Beatrice Glow


Esta noche a las 10 PM en Neomutasis (Prolongación San Martín 110, Barranco) la artista Beatrice Glow, junto a Pauchi Sasaki, realizará una performance denominada "Cuarta mutación". A su vez, habrá música, mural y galería. Valga mencionar que Beatrice Glow es una artista plástica conceptual nacida en California (de familia taiwanesa) y que sigue estudios en New York University en el programa de Studio Art con historiadores de arte como Roselee Goldberg y David Rimanelli. Ha participado en bienales de performance en New York y Santiago. Actualmente se encuentra en el Perú (gracias a una beca de la Fundación Fulbright) donde desarrolla el proyecto "Performance de la memoria colectiva: trazando la geografía de los culíes" con el apoyo de Yuyachkani. El proyecto comprende el "Mito Taparaco", el cual "aspira a trazar geográficamente la ruta de escape de los culíes del siglo XIX y la migración china hacia los andes y la selva peruana a través de un viaje tejido por los momentos principales de la migración: desde las islas guaneras en las islas de Chincha, las haciendas costeñas, la construcción del ferrocarril, la leyenda negra del caucho en las selvas, hasta un pueblito en el río Tahuayo cerca de Iquitos llamado El Chino", según comenta ella misma en la plaqueta que ha editado para dar cuenta de este interesante "gesto simbólico de búsqueda autobiográfica por señales ancestrales".

En la foto: la talentosa Beatrice Glow en dos instantáneas.

Encuentro con Ángeles

El director del visitado portal literario Porta9, Francisco Ángeles, entrega su primera novela

Por Juan Carlos Gambirazo*

La enajenación de un personaje y su relación con gente a la que jamás llega a conocer realmente, en el contexto de un gobierno que manipula a la población, es el ambiente en el que gira La línea en medio del cielo, la primera novela de Francisco Ángeles bajo el sello de Revuelta Editores. Aquí una breve conversación con el autor, influenciado según propia confesión por Fuguet, Bellatin y Kenzaburo Oe.
Hay en este libro un trasfondo político tenue, un paralelo que nunca llega a tomar peso.
La gran idea de la novela es no entender la realidad, verla en un contexto ilegible, como un juego de máscaras que van cambiando. Quise representar un poco el asunto político, pero no quería hacer una novela realista, tradicional. Quise ser fiel a cómo yo veía en esa época el tema.
¿Cuándo empezaste a escribir el libro?
En el año 2001. La idea era retratar de alguna forma una época que yo viví en el año 2000. Fue un año raro y bastante convulso internamente. Muy concentrado en lo mío, no veía nada más allá de la gente que me rodeaba, que eran pocos. Mis amigos participaban en las marchas contra el gobierno y yo estaba en otra. Entonces quise indagar cuál era el punto de contacto entre esa realidad macro que era la etapa final del mandato de Fujimori y mi vida.
Paralelamente a la creación, tienes también otras vinculaciones con la literatura.
Tengo una página web colectiva de literatura, se llama Porta9. Somos diez personas. Este año hice cerca de 40 entrevistas en video. Reseñamos uno o dos libros a la semana, casi siempre peruanos y actuales. Visité cuatro ciudades buscando escritores: Trujillo, Arequipa, Chimbote y Cusco.
¿Qué otras publicaciones estás preparando?
Espero publicar en el 2010. Me interesa mucho lo que es internet como cambio cultural. Sobre esta novela me han dicho que es bastante cerebral. Yo no quise hacerla exactamente así, me hubiese gustado que tenga algo de corazón.

* Publicado en Caretas 2058.
En la foto: Francisco Ángeles.

jueves, diciembre 18, 2008

Entrevista a Siu Kam Wen


Incluyo la entrevista realizada por Enrique Sánchez Hernani a Siu Kam Wen el último sábado en el suplemento Somos del diario El Comercio. Hacer clic para ampliar.

El microrrelato más traducido del mundo


El escritor José Donayre se ha propuesto la siguiente empresa: "El texto 'Asunto de esferas sobre el río Arno', publicado en la página 87 de mi libro de microrrelatos Ars brevis (Mesa Redonda, Lima, 2008), aspiro a convertirlo en la ficción en español con más traducciones". Este es el relato: "Asunto de esferas sobre el río Arno. Beatriz inventó a Dante: escogió al muchacho y puso en juego todas sus artes de seducción. Fue un encuentro diseñado por la distancia de dos sujetos que se observan discretamente desde un momento hipotético —en el puente Santa Trinidad— hasta un punto temporal en el que la ficción corre el riesgo de perder el encanto de la intriga sobre la que se estuvo erigiendo tras años de evocación. Dante hizo de este drama una comedia poco humana. Y Beatriz jamás pudo entrever ni adivinar el sentido divinamente angélico de su infantil maldad". Pueden ver aquí la traducción al inglés a cargo de Rodolfo Ybarra. La fiebre del microrrelato.

PD: Gustavo Buntinx escribe en su weblog sobre la "involuntaria reivindicación de Eduardo Villanes por el grupo Colina". José Rosas Ribeyro, por su parte, respondió el martes en Sol negro al artículo de Bethsabé Huamán Andía sobre el caso María Emilia Cornejo.

En la foto: "Dante y Beatriz a orillas del Leteo" (1890), óleo de Cristóbal Rojas.

miércoles, diciembre 17, 2008

Literatura peruana en China


Por Antonio Fernández Arce*

Esta imprevisible China siempre nos está deparando sorpresas. No solo nos sorprendió políticamente con la audacia de las reformas y la apertura al exterior que, inéditas hasta entonces en el mundo, emprendió hace tres décadas. También nos desconcierta gratamente con sus resultados y proyecciones que hacen a tirios y troyanos al hablar de este como "el siglo de China". Ahora sigue sorprendiéndonos a cada paso con su increíble apertura cultural y humanística.
Esta apertura cultural hace que los intelectuales chinos vuelquen su interés hacia la literatura hispana y latinoamericana y que hasta destacados traductores —poetas y escritores— realicen la difícil proeza de hacer conocer en idioma chino los poemas de César Vallejo, el más universal de los poetas de habla española.
A comienzos de la década de 1980, en uno de nuestros tantos retornos a este subyugante país, alguien nos dijo haber visto en librerías un volumen sobre el Perú, cuya cuya contraportada se había colocado una foto del recordado primer ministro Zhou Enlai con el suscrito. Buscamos y dimos por fin con el libro El Imperio de los Hijos del Sol, traducción del chino, cuyo autor —lo conocimos años después—, Zhang Husheng, nunca había estado en el Perú, pero siempre se sintió cautivado por la historia, la cultura y la fascinante realidad geográfica y social de nuestro país. Había escrito un capítulo especial del libro, precisamente dedicado a evocar el perfil profundamente humano de Zhou Enlai. Recordó que la prensa china en 1970 se había hecho eco de esa real historia, que no soy proclive a evocar salvo para, eso sí, exaltar la memoria de ese gran hombre que fue Zhou en todos los aspectos de su vida. Había nacido mi segunda hijita en Beijing y a los pocos días contrajo una terrible enfermedad. La niña solo pudo ser curada tras la intervención personal de Zhou Enlai, cuya amistad me honraba, quien convocó en Beijing a los mejores médicos militares del país. Ocho meses después, tras inenarrables angustias, llevé a mi niña al Perú sana y salva. Seis meses más tarde volvimos a China, también debido al primer ministro Zhou, por cuyo encargo mantuvimos vínculos con el Gobierno peruano para el mutuo reconocimiento oficial entre los dos países.
Solo valga esta referencia (entre tantos sucesos vividos en casi medio siglo de contacto con este gran país) para apuntalar mi aseveración de que China nos acostumbra a las más increíbles sorpresas.
Ahora, es la maestra china Liu Xiaomei —destacada experta en idioma español, veterana profesora de muchas generaciones de chinos hoy hispanohablantes, estudiosa a más no poder de la realidad, la cultura y la literatura de los países de habla española— quien nos trae una nueva sorpresa. Ha publicado un volumen, Literatura peruana, por supuesto enteramente en chino, tras varios años de estudio y traducción.
Tampoco ha estado en el Perú. Pero tiene una gran ventaja: ama y conoce nuestra cultura, admira y lee con fruición autores y libros peruanos. Y, sobre todo, su gran fuente de consulta está a su lado permanentemente. Es su esposo, Zhang Guangsen, extraordinario lingüista del idioma español, autor de diccionarios en español y chino y, él sí, conocedor del Perú y de todo lo peruano.
A Liu Xiaomei le apasiona la literatura de habla española. Y la peruana. Hace tiempo tradujo al chino Los perros hambrientos de Ciro Alegría. No hace mucho, los soberbios cuentos de Julio Ramón Ribeyro, y hace poco, los de Alfredo Bryce Echenique, cuya pluma admira y a quien considera "representante de la literatura hispanoamericana después del boom". Gracias a ella, a su infatigable quehacer literario, las librerías chinas, que gozan ahora con una estupenda eclosión editorial, difunden la literatura peruana. Se trata de la reseña más sistemática y completa del proceso histórico de la literatura de nuestro país.
La obra, que corresponde a la colección Historia de la Literatura por Países, auspiciada por la Universidad de Estudios Extranjeros de Pekín, ha sido dividida por la autora en cinco partes. La primera es una introducción expositiva sobre la evolución histórica de la cultura peruana desde el siglo X a.C. hasta la llegada del conquistador español.
La segunda parte abarca tres fases de la literatura peruana prehispánica: la épica, con leyendas de las regiones del Perú; la lírica, desde los primeros versos indígenas conocidos ("kayllalapi / puñanc / chaupi tutan / hamurai ki", recogidos por el Inca Garcilaso de la Vega en Comentarios reales) hasta los aravís y los yaravís; y la tercera parte, obras teatrales, con un capítulo especial sobre Ollantay y piezas en quechua aparecidas durante la Colonia, como El pobre más rico y Atawallpa.
La literatura peruana de la época colonial es analizada prolijamente en dos facetas. La primera, desde la conquista hasta comienzos de la colonia, comprende: a) crónicas, como las de Pedro Cieza de León (Crónica del Perú), de Pedro Sarmiento de Gamboa (Historia de los incas), José de Acosta (Historia natural y moral de las Indias) y Agustín de Zárate (Historia del descubrimiento y conquista del Perú); b) el Inca Garcilaso de la Vega, su vida y obra, La florida del inca y, especialmente, Comentarios reales; c) poesía y canciones populares (Diego de Aguilar y Córdoba, Enrique Garcés, Diego Maxía de Fernangil, Diego Dávalos de Figueroa, Rodrigo de Robles y Carbajal, Diego de Hojeda y otros); y d) épica, con Juan de Miramontes y Zuózola (Armas antárticas) y sobre todo Pedro de Oña (El arauco domado). En la otra faceta, correspondiente a la plena época colonial, la autora estudia el gongorismo de Juan Espinoza Medrano; y la obra de Juan del Valle Caviedes, la poesía academicista de Luis Antonio de Oviedo y Herrera, y obras de Pedro José Bermúdez de La Torre y Solier, Pedro de Peralta Barnuevo; las coplas satíricas anónimas y Juan Francisco del Castillo y Esteban Terralla; El lazarillo de ciegos caminantes y su trascendencia en el desarrollo social y literario de Hispanoamérica.
Cien años de literatura peruana desde antes hasta después de la Independencia son tratados por Liu Xiaomei con un criterio didáctico y con gala de conocimientos. Abarca la guerra independentista, la obra literaria de precursores como José Baquíjano y Carrillo y Juan Pablo Vizcardo y Guzmán; las canciones populares, el primer poeta romántico, Mariano Melgar, y escritores de la talla de Joaquín Larriva, Manuel Lorenzo Vidaurre y José Manuel Valdez. Prosigue estudiando el costumbrismo de Manuel Ascencio Segura, Manuel Atanasio Fuentes, José Antonio Lavalle y Flora Tristán. Enfoca luego el romanticismo de Carlos Augusto Salaverry, Manuel Nicolás Corpancho, Clemente Althaus, José Arnaldo Márquez, Luis Benjamín Cisneros, Juan de Arona, Ricardo Palma (cuyas Tradiciones peruanas hace mucho que están enteramente traducidas al chino), y otros autores representativos como Acisclo Villarán y Fernando Casós (Los hombres de bien, Los amigos de Elena).
Liu Xiaomei destaca en la faceta del realismo de esta etapa histórica a dos escritoras notables: Mercedes Cabello de Carbonera (Sacrificio y recompensa, Los amores de Hortensia, Eleodora, Blanca Sol, Las consecuencias y El conspirador) y Clorinda Matto de Turner (Aves sin nido, Índole y Herencia). En prosa y verso dedica especiales análisis a Abelardo Gamarra, Carlos Germán Amézaga y Manuel González Prada. En el modernismo destaca a José Santos Chocano (Alma América), así como a Domingo Martínez Luján, Leonidas Yerovi, José Eufemio Lora y Lora, Clemente Palma, Angélica Palma, Manuel Beingolea y Enrique Carrillo. De entre los poetas y ensayistas de comienzos del pasado siglo, trata sobre las obras de José de la Riva-Agüero, Francisco y Ventura García Calderón, Víctor Andrés Belaunde, José Gálvez, Luis Fernán Cisneros, Alberto Ureta. Y en el posmodernismo ubica a José María Eguren (Simbólicas, La canción de las figuras y Poesías), Enrique Bustamante y Ballivián, Abraham Valdelomar, Percy Gibson y César Atahualpa Rodríguez, José Carlos Mariátegui (cuyas obras, desde Siete ensayos de la realidad peruana hasta El alma matinal están traducidas al idioma chino) y Enrique López Albújar.
Es en la quinta parte del libro donde la autora Liu Xiaomei incide en la calidad de la creación literaria peruana. Exalta en poesía la de César Vallejo (Los heraldos negros, Trilce, España aparta de mí este cáliz, Poemas humanos) y destaca en forma analítica, en la década de 191 0, a Juan Parra del Riego, Alberto Hidalgo y Alberto Guillén. En la década de 192 0, a Alejandro Peralta, Emilio Armaza, Luis de Rodrigo, Emilio Vásquez, Carlos Oquendo de Amat, Enrique Peña, Martín Adán y otros. En la de 1930, a José Alfredo Hernández, Luis Fabio Xammar, José Alvarado Sánchez, Manuel Moreno Jimeno, Luis Valle Goicochea, y en la década de 194 0 y en adelante, a Carlos Alfonso Ríos, Jorge Eduardo Eielson, Sebastián Salazar Bondy, Javier Sologuren, Demetrio Quiroz-Malca, Luis Nieto, Mario Florián, Julio Garrido Malaver, Gustavo Valcárcel, Juan Ríos, Washington Delgado, Alberto Escobar, Cecilia Bustamante, Blanca Varela, Alejandro Romualdo, Arturo Corcuera, Juan Gonzalo Rose, Manuel Scorza, Francisco Bendezú, Carlos Germán Belli, Francisco Carrillo, Sarina Helfgott, Javier Heraud y otros.
Esta quinta parte de Literatura peruana, libro que ingresa para una nueva edición en el horno editorial en Beijing, expone la obra de novelistas y cuentistas peruanos, y señalan grandes aportes de la narrativa peruana a la literatura hispanoamericana y mundial, y hace destacar, entre otras, las obras de José Diez Canseco, Héctor Velarde, Emilio Romero, María Wiese, Cota Carvallo, Francisco Izquierdo Ríos y Porfirio Meneses. Dedica capítulos especiales a cada uno de los que la autora considera los más representativos de la narrativa contemporánea: Ciro Alegría, José María Arguedas, Julio Ramón Ribeyro, Mario Vargas Llosa y Alfredo Bryce Echenique; no sin resaltar la obra de narradores consagrados como Eleodoro Vargas Vicuña, Carlos Eduardo Zavaleta y Oswaldo Reynoso, este último bastante conocido en China, donde desplegó durante varios años excelente trabajo de difusión literaria.
No por abundar en nombres, títulos, fechas y pruebas de bien conocer las obras literarias peruanas, no solo por eso, resulta valiosa la obra Literatura peruana de la profesora Liu Xiaomei.
En el proceso de globalización de la cultura —para emplear el término de moda en nuestros tiempos— la interacción debe basarse también en el cada vez más amplio conocimiento de las creaciones propias de cada pueblo. Y en la asimilación de sus buenos valores. La profesora Liu Xiaomei está demostrando ante la cuarta parte de la humanidad (la población china), a la que va dirigida su obra producto de varios años de investigación, análisis y elaboración, que la nuestra, la cultura peruana, ha desarrollado desde siempre excelsos valores también susceptibles de ser asimilados por otras comunidades humanas.


* Capítulo 64 de su libro China: el asombro (Ediciones Copé, 2008, págs. 441-445), el cua será presentado hoy a las 7:00 pm por Guillermo Dañino Ribatto y Luis V. Chang en la Oficina Principal de Petroperú (Canaval y Moreyra 150, San Isidro).
En la foto: carátula del libro.

martes, diciembre 16, 2008

Un poema de Rafael Espinosa

Incluyo a continuación un poema de Aves de la ciudad y alrededores, el reciente poemario de Rafael Espinosa, el cual ha sido considerado (junto a Las palabras no pueden expresar lo que yo experimenté entonces de Oswaldo Chanove, Los desmoronamientos sinfónicos de Miguel Ildefonso, Nudo Borromeo y otros poemas de Rodolfo Hinostroza y Ocho cuartetas en contra del caballo de paso peruano de Mario Montalbetti) entre los mejores poemarios del 2008 por el diario El Comercio.

CANTILEVER

Por lo mismo que se repite, ese chorro
evade la simetría que lo explica. Deja
el descanso y la blandura para otros que lo oyen
de paso, por ejemplo el del gorro tejido
por artesanos soñadores. Y se van
pero como siguiendo el bien. Aunque no sé
exactamente si esto es lo que quiero decir.
El sonido, tomando el lugar de una herida,
dice que sí. Tal vez quise decir, antes
por esta parte pasaron probablemente burros
y caballos con los asuntos del día
sublimándose en los destellos de la hierba
agitada. Ahora no es un camino
desierto. Hay promesas en vinilo, autos
parlantes, hay en las bancas embellecidas
por una iluminación estudiada todavía
el calor de los pedidos confusos.
Mientras los muertos leves se estrellan
contra el granito italiano del lapso
postmoderno, sin resignarse a la falta
de dolor, hay por encima de todo
una estampida coreográfica hacia bordes
emotivos, como cuculíes y tórtolas
aterrorizadas por la sombra arcaica
del gavilán. Aterrorizadas en balde
porque ocurrió en otro sitio y otro tiempo,
no en este camino. Y siguen los tickets
rotos que podrían ser sentimientos
reencontrados: ¿es este el camino de la vida?
Da ganas de llorar. Tantas especies de aves,
cada una con su ingeniería propia
para construir nidos, y solo se cuenta
con ellas en el momento que se quiere
recargar los arcos superciliares
con analogías de tersura y ascenso,
como asediando un estado de silencio.
Aun si de antemano sabemos que no se trata
de eso tampoco, porque de otra manera
¿por qué no nos cristalizamos en lágrimas
fónicas, y pasamos en vez al hastío?
Y me estoy parando; el mundo es excesivamente

bello y hojoso. Hay hojas y hojarasca
cubriendo toda la gama apagada del marrón,
camuflando la filigrana del recuerdo
en un vestido con diseño de leopardo.
Mejor ven yo mismo circunvalando
la vasta piedad que sientes por ti mismo
para unirte al flanco que menos se te parece
en mí. Quizá es lo que quieres y quiero, y tal vez
haremos trato. El camino será todavía
menos desierto, habrá más mujeres
y umbrales para darse cuenta cómo un tiempo
contrafáctico se congració en ellas;
en nuestro amor que conservó su apuro
y su adolescencia resguardando con lástima
y celos la belleza que habían transferido
en una estación ya remota a las especies de aves.
Por lo tanto, los árboles no son tan ciertos.
Se curvan en el mismo periodo sofisticado
de las mujeres, más amados como estela
que belleza. Que yo sepa aquella es longitudinal
y producida por un don que se mueve.
Estoy, entonces, lo más lejos posible del centro.
Hay pavor y peatones. Hay oración
y repartidores, y en los escaparates
formas que no son intermedias. Si puedo
describirlas, creo que estará bien; si puedo amarlas
me abriré un camino entre los diseños
paisajísticos y su vida imaginaria.
Debo, así, ir. Tras el del gorro, que donde esté
ahora diverge, como se enlazan en el morbo
de la tarde-noche, razonamiento y trino.
La casaca corta el viento, lo reúne en fe.
Ir, eso es lo que me gustaría decir. Quizá
haya borlas. Y sillas Panton. Y más viento.

lunes, diciembre 15, 2008

Más Montalbetti

Diego Otero entrevistó ayer en El Dominical de El Comercio a Mario Montalbetti a propósito de su reciente poemario Ocho cuartetas en contra del caballo de paso peruano. Incluyo una pregunta. "8CCCPP, más que cualquiera de tus otros libros, propone una poesía del lenguaje. Es decir, una poesía que ausculta los mecanismos de la representación verbal y no los de la experiencia. ¿No crees que hay un riesgo ahí?": "Mucho de lo que llamamos realidad no es sino una construcción del lenguaje. Para los lacanianos, por ejemplo, existe [lo] real, que es esta especie de excreción del orden simbólico, del lenguaje, de modo que el lenguaje se construye casi como una defensa frente a ese real indomable. Piera Alaugnier es una analista francesa que afirma que la primera violencia que sufre un niño sucede cuando no puede entender lo que le dice la madre. Y creo que esa violencia es la que de alguna manera reproduce el poeta". Por otro lado, este sábado el suplemento Somos del diario El Comercio publicó en su página de libros la siguiente nota sobre Ocho cuartetas en contra del caballo de paso peruano: "Mario Montalbetti ha desarrollado una de las obras poéticas más consistentes del parnaso peruano contemporáneo. Desde los ya lejanos tiempos de Perro negro (1978) hasta Cinco segundos de horizonte (2005), el vate le ha dado cuerpo a un lenguaje donde la sensibilidad y el intelecto no solo no están reñidos, sino que se conjugan para producir versos de rara belleza: '¿por qué hay nada en lugar de haber una pregunta? desmonte paraíso para eso'. En su último opus, cada verso parece sostenerse por sí mismo, independiente del todo del que forma parte, dando la impresión de que su ordenamiento es aleatorio. El efecto, como puede suponerse, es inquietante".

En la foto: Mario Montalbetti. "En mi poesía, sobre todo en este libro, el sentido se manifiesta como una dirección, como un camino que se abre pero que no nos muestra su final", señala.

domingo, diciembre 14, 2008

José Güich sobre La iluminación de Katzuo Nakamatsu

"La iluminación de Katzuo Nakamatsu [de Augusto Higa Oshiro] abre una línea inusitada en la dilatada trayectoria del autor. El personaje principal, un profesor universitario, emprende su extraño viaje a través de una Lima infernal, deteriorada, moderna, y frente a la cual este catedrático nisei alberga sentimientos encontrados. La soledad y el vacío de una existencia gris lo llevan a recorrer sórdidos pasajes del inframundo urbano. En esa jornada de duro autodescubrimiento, Katzuo será acosado por voces y sombras del pasado. Identificado con Martín Adán, su poeta predilecto, y con un aguerrido inmigrante llamado Etsuko Untén, el protagonista desciende a los abismos más oscuros de su identidad, especialmente la sexual. Entre líneas, se revela que parte de su angustia nace de la traumática y salvaje persecución emprendida contra la comunidad japonesa-peruana en los días de la Segunda Guerra Mundial. El satori, la ansiada visión de lo esencial, se manifestará en forma inesperada, justo al borde de la inevitable extinción de Nakamatsu. Si hay un libro indispensable entre los publicados durante el año que ya se extingue, es este trabajo de orfebrería que hiere como una sutil daga en las urdimbres del espíritu", señala José Güich Rodríguez en su columna de hoy de Correo. Incluyo un fragmento de la novela referido a Martín Adán: "Alguna vez en su juventud, Katzuo había visto a Martín Adán alcoholizado por las calles del centro, la época en que vivía en el manicomio, atrincherado en su yo, clamando su monólogo para nadie, y luego había terminado sus días en el asilo, naturalmente en olor de poesía, escuchando su música desgarrada. Pero aquella música era su sí mismo, y años antes de La mano desasida, por encima de dolores, culpas, o tormentos, Martín Adán ya estaba al otro lado de las miserias humanas, sin miedo a las muertes, totalmente solo, él era él, en su poesía callada, la que no dice nada, y es pura tautología" (29). Y otro fragmento más, que asocia la novela con tópicos relacionados a la obra de Oswaldo Reynoso (En busca de Aladino, El goce de la piel): "Con la curiosidad a flor de piel, dejó atrás las coliflores y los efluvios del culantro, y sin saber por qué se detuvo ante un adolescente pertinaz en camisa azul y pantalones de vaquero que escogía las hojas de ruda sobre un taburete. Soltó un suspiro al dar cuenta de su tez límpida y aceitunada, más tarde contuvo el aliento ante el perfil agareno y aquellos labios burilados como líneas agudas y alargadas; las cejas interrogativas y extrañas, sombreaban una mirada oscura y profunda; la cabellera ensortijada caía hacia atrás. En el tiempo infinito, Katzuo observó sus bellos movimientos en el aire, y solamente cuando terminó de husmear los admirables pies en sus alpargatas, exhaló un terrible alarido que se extendió a todo el mercado: era un llanto, un fragor de las entrañas, desde lo más secreto del inconsciente. Al cabo de una punta de años, después de excepcionales búsquedas, al final de urgentes desvelos y míseros días, por fin encontraba al mancebo esquivo, de piernas refinadas, brazos perversos, labios pálidos, y el cerco de los dientes inapelables. El adolescente apetecido, codiciado, mil veces soñado, infinitamente presentido en sueños, y cuantiosas noches de borrasca. Inmediatamente después, Nakamatsu se despojó del saco, la camisa, los pantalones, los victoriosos zapatones, y las prendas íntimas, y se quedó desnudo ante el muchacho de los ojos oscuros, y ante la compacta multitud. Entonces, llorando, arrodillado, clamando al cielo y al infierno, solamente susurraba para sí mismo: '¡La belleza existe! ¡La belleza existe!' Katzuo Nakamatzu había ingresado al kenshó, el satori, la visión de la naturaleza esencial" (106-107).

En la foto: Augusto Higa. "Sorprende con una contundente nouvelle", afirma Güich.

sábado, diciembre 13, 2008

Encuesta literaria 2008


Acaba de aparecer una Agenda peruana de literatura, la cual viene realizando una encuesta literaria en los campos de la novela, el libro de cuentos, poemario, antologías, reediciones, etc. Dicha página está armando las listas de libros por cada categoría, para lo cual pide la participación de los lectores hasta el próximo sábado 20 de diciembre. Al día siguiente de esa fecha se activará la opción de encuesta para que cada usuario vote por su libro favorito.

viernes, diciembre 12, 2008

Montalbetti entre líneas


Lingüista y poeta, Mario Montalbetti llega al galope con dos poemarios bajo el brazo y mucho reto para el lector

Por Maribel de Paz*

Ocho cuartetas en contra del caballo de paso peruano no tiene nada que ver con el caballo de paso peruano. Publicada por el Álbum del Universo Bakterial, la última entrega del poeta y lingüista Mario Montalbetti busca, así, remarcar que más importante puede ser el número de versos que el título mismo de un poema. Trabajando a contracorriente del lenguaje, incidiendo en la repetición de los versos y apartándose de la búsqueda de significados, el vate, discípulo de Noam Chomsky, llega, además, con otro libro: El lenguaje es un revólver para dos, editado por la Colección Underwood de la U. Católica, una especie de bonus track con poemas rescatados de lo que quedara fuera de Cinco segundos de horizonte, su libro anterior. Y por si fuera poco, Ocho cuartetas…llega, además, con anuncio de epitafio propio entre sus versos: "se fue de lengua".
Al terminar de leer Ocho cuartetas… queda la sensación de que es un poemario críptico, experimental. ¿Qué has buscado con esta entrega?

La tesis fundamental es que el verso es más importante que el poema, es decir, que las partes son más importantes que el todo, y se indican direcciones por donde alguien que lo lee puede darle la significatividad que quiere.
¿Hay en este poemario una voluntad de comunicar?
No, la comunicación es una de las peores ideas que tiene el ser humano respecto del lenguaje, menos aún en poesía. No trato de comunicar nada.
¿Por qué publicas entonces?
Porque fuera de la comunicación, de dar significados, hay otra cosa que se puede hacer. Y es dar fragmentos que indican direcciones a ningún lugar específico. Es como la diferencia entre una señal de tránsito que te da el sentido del tránsito, y otra que te promete una Plaza de Armas al final de la flecha. Yo no te prometo ninguna plaza, te digo solamente "tomemos un micro y vayamos en cierta dirección, y si te quieres bajar en algún lugar me parece fantástico".
¿Y hacia dónde te llevan a ti tus propios versos?
Si lo supiera lo escribiría, pero sí me llevan a buscar cosas que no me garantizan ni unidad ni totalidad. Se parece más a cierta deconstrucción derridiana, es decir, el destejer ciertos hilos y ver hacia dónde va este destejimiento. Hay gente que escribe con toda la comodidad del lenguaje detrás suyo. Yo no.
Dices en un poema "compañeros nuestros versos está demasiado pesados demasiado cargados de castellano". Y aplicas, también, una ruptura gramatical.
En contra del todo de la gramática, el todo de la Academia de la Lengua. Creo que cuando usas formas incorrectas de hablar encuentras la dirección del lenguaje. Pero la gente busca otra cosa.
¿El preciosismo?
No, también leen a Osho. Lo que pasa con el ser humano es que es como un toro que embiste ante ciertas muletas, y hay una a la que siempre embiste: el significado. El significado es el gran ansiolítico de la sociedad. Entonces, cuando escuchas los bombos en una sinfonía de Tchaikovsky dices "ah, esos son los cañones del ejército ruso, fantástico".
Alguna vez dijiste que el poeta en el fondo no sabe lo que hace. ¿Tú tampoco lo sabes?

No sé lo que estoy haciendo. La gente piensa que el poeta sabe cuál es el significado del poema críptico, pero el poeta no lo sabe, y por eso escribe.
Chomsky, tu maestro, centra parte de su discurso en el resguardo de la seriedad. ¿Cuál dirías que es la principal falta de seriedad que aqueja al Perú actualmente?
Uf. ¿Puedo decir el APEC? Una de las grandes faltas de seriedad en el sentido de seriedad de análisis tiene que ver con los medios, con la casi imposible distinción entre un blog y un periódico. Realmente el diario El Comercio es un blog, da opiniones y no ideas.
¿Versus la prensa estadounidense?
Tampoco hay mucha diferencia entre el New York Times y los blogs. Y en el Perú hay mejores noticias mejor comentadas en El útero de Marita que en El Comercio. Con el APEC se vio clarísimo. Para mí el APEC es un road show con 21 personas que se ponen un poncho y cantan una vez al año en diferentes zonas de la región. Esta vez la canción se llamaba "no al proteccionismo", pero nadie analizó qué quería decir. Quiere decir que si tienes una compañía al borde de la quiebra puedes botar a un trabajador, pero a ti como dueño sí te van a ayudar, te van a decir sí al proteccionismo. Entonces, ¿qué tipo de canción es esta de 21 personas a las que solo les faltaba el caballo de paso? Que en realidad es un caballo de Troya en el que te meten el neoliberalismo más radical. Parecería que hubiera una tarea de embrutecimiento adrede de la sociedad.

* Publicado en Caretas
2057.
En la foto: Mario Montalbetti. "En el Perú hay mejores noticias mejor comentadas en El útero de Marita que en El Comercio", señala.

jueves, diciembre 11, 2008

José Donayre sobre narrativa peruana actual

Encuentro en los weblogs Esta boca es mía y En mis estantes de José Donayre Hoefken varias reseñas suyas a diferentes novelas y libros de cuentos de autores peruanos publicados a lo largo de este 2008 que ya se nos va. A continuación, incluyo fragmentos de cuatro de sus reseñas.

Sobre Que la tierra te sea leve de Ricardo Sumalavia: "Con esta novela me queda muy claro que Sumalavia es el escritor mejor consolidado del grupo de narradores bisoños que conocí antes de 1990. Que la tierra te sea leve es un libro con muchas virtudes, pero, sobre todo, compuesto a la luz de una mística literaria que el autor empezó a cultivar desde su primera entrega: Habitaciones. Sí, mística. Concepto que escritores alrededor de los cuarenta años pueden saber de su existencia y uso lingüístico, pero que no logran, a partir de este término, establecer un estilo o plantear un norte literario, pues se hallan en la banal y frívola carrera de atender un mercado o posicionar su nombre sobre la base de una estrategia de marketing. Hablamos de fama y reconocimiento, pero no necesariamente de consagración y éxito, que se logra con un trabajo constante y comprometido, en el que el buen uso del idioma, más que un detalle, es prácticamente todo, a fin de que el quehacer literario no solo sea una imitación de la realidad sino la reinvención de la palabra misma. Y aquí estamos en un nivel literario mayor y muy complejo: la mística de la poética, ámbito que Sumalavia explora a sus anchas y a todo riesgo".

Sobre Como los verdaderos héroes de Percy Galindo: "No hay que olvidar que Como los verdaderos héroes es -en gran parte y desde sus primeras palabras: 'Diecisiete puñaladas'- una novela policial, por lo que el recurso de los testimonios y testigos, en muchos casos, más que explicar, revelar, confundir o contradecir, exacerban el ritmo narrativo. Estamos ante pulsiones verbales que apuntan hacia un remate abierto e irónico ('Breve nota de un encargo') que tiene las siglas del autor (P.G.R.) como firma -final en el que incluso la autoría del registro de los testimonios queda en duda-. Pulsiones que crean también surcos de historias secundarias, pues como ocurre en la vida ningún hecho es realmente aislado -aunque sí aislable-. Galindo, con notable destreza, consigue armonizar estas historias secundarias en un cuerpo bastante sólido".

Sobre Los espectros nacionales de José Güich: "Ocho relatos de ficción fantástica: 'Los espectros nacionales', 'El otro monitor', 'Ubicuidad de las voces', 'Vórtice en Prescott', 'La penumbra', 'Intersecciones', 'Los pasajes errantes' y 'La reina madre'. José Güich se enfrenta al mundo físico con resultados tan sorprendentes como ingeniosos y desconcertantes. Con un uso sobrio y preciso del lenguaje, consigue una sólida colección de relatos fantásticos que soliviantan al lector en su relación con la 'realidad real'" .

Sobre Playas de Carlos Calderón Fajardo: "Narradas con un estilo seco y directo -y tramadas desde la metáfora del mar y el símbolo de la arena-, las dos historias de Playas -'Playa Ballena' y 'Punta Negra', en ese orden— son una reflexión sobre la vida con la vejez y la muerte como telón de fondo. En estos escenarios, el tiempo —en cuanto transcurso y percepción como experiencia íntima y personal— es el espíritu que articula el cuerpo de los hechos, en cuanto color, textura y temperatura. [...] El mar, después de todo, imagen de muerte y figura de memoria, en manos de Calderón Fajardo, es un lugar que se inventa a medida que se le disfruta o se le teme o se le mira. Y Playas -austero, costero y, por tanto, certero título- es una doble mirada ofrecida con talento e inteligencia, para recordarnos que la literatura puede hacer mejores personas a los lectores ante las adversidades de la existencia, pero no necesariamente a quienes la cultivan. Punzante verdad que Calderón Fajardo no duda en enrostrar a unos y a otros desde su bien ganada y prominente orilla, su trono como rey de las playas".

En la foto: narrador y crítico literario José Donayre.

Susti: roquero, poeta y académico


Hoy en la contracarátula de El Peruano José Vadillo Vila entrevista a Alejandro Susti, "roquero, poeta y académico" que acaba de presentar Islas, "su cuarto CD de su carrera en solitario". El disco reúne 12 temas grabados junto a Daniel Willis (D'mente común), músico ya incluido en el trabajo anterior de Susti (Kaoscopio, 2005). A continuación, transcribo un fragmento del reportaje de Vadillo: "Los otros Susti. [E]n el verano, cuando se tome una pausa de su labor académica en tres universidades, Susti se dedicará a avanzar sus otros proyectos: revisará la edición final de Cadáveres, un libro de poemas dedicado a la muerte, visto desde la niñez, la familia y el deterioro de la vida cotidiana. Así, el libro, mención honrosa el año pasado del premio Copé de Poesía, se editará en 2009. El poeta y músico también lleva varios años en una novela de aire autobiográfico. Lo que está muy avanzado es la investigación sobre el poema en prosa peruano, un trabajo conjunto que elabora con Carlos López Degregori, Luis Fernando Chueca y José Güich. Susti se ha centrado en la poética en prosa de Blanca Varela y César Vallejo. Este proyecto saldrá a más tardar en 2010, adelanta. Para Susti, lo académico y lo artístico no son separados: el crítico debe ser creativo en sus ideas para aportar nuevas perspectivas. Y cada lenguaje es único: la música tiene ritmo y sensualidad, la poesía es la retrospección y exploración lingüística. Lo académico es rigurosidad y reflexión". Susti es autor de los poemarios Corte de amarras (2001) y Casa de citas (2004). A continuación, transcribo un poema en prosa de su poemario inédito Cadáveres; texto incluido este 2008 en la Antología de los finalistas de la XIII Bienal de Poesía "Premio Copé Internacional 2007": "Playa. Desnuda como un barco, encadenada a las piedras, horadada por el deseo. En tu playa de alcoba el glauco fruto de tu sexo, desplegado en virutas de arena y yo dentro como un músculo de fuego barriendo sus reflejos y la lenta cabellera jadeante de sus peces. // Por el alto cielo de tus labios te asomas al contorno de mi boca y te ensanchas y comprimes como un vasto anillo que todo lo cubre y no cesa y no muere".

En la foto: carátula de Islas. "Es un disco con más libertad, porque no me he dedicado a tocar los temas neurálgicos de la sociedad", señala Susti.

miércoles, diciembre 10, 2008

Bethsabé Huamán y el caso María Emilia Cornejo

El último sábado el weblog Sol negro republicó un extenso y posicionado artículo de Bethsabé Huamán Andía titulado "Mujeres, escritura y poder. El caso de María Emilia Cornejo" y los poemas "Soy la muchacha mala de la historia", "Como tú lo estableciste" y "Tímida y avergonzada". Entre otros aspectos, Huamán Andía señala en su recapitulación que "esos poemas conllevaba el poder de una palabra no sumisa que quizá la misma María Emilia [Cornejo] jamás hubiera sido capaz de enarbolar, pero que el azar (e incluso puede que un par de manos) nos dieron a la luz. Es muy grave lo que está en juego en relación con María Emilia, no tanto por el hecho de que haya escrito o no los poemas, que está claro la esencia es suya aunque haya sido transformada la forma, sino por la repercusión simbólica que ello tiene sobre la posibilidad de conformar una tradición artística y una identidad". Vale la pena recordar, respecto a "la forma", que en su "Prólogo a la segunda edición" de En la mitad del camino recorrido Carmen Ollé apunta que "el estilo, como expresión, es el que impone la calidad, y no el tema, como se cree, el que alcanza la intensidad en un texto literario" (8).

En la foto: carátula de En la mitad del camino recorrido de María Emilia Cornejo.

martes, diciembre 09, 2008

Cuestión de piel


Reproduzco un reportaje de Marco Sifuentes de Útero Tv a propósito de unas recientes declaraciones del presidente Alan García (calificado tajantemente por el poeta José Carlos Yrigoyen en el minuto 5:05 del vídeo) sobre el socorrido tema de la cuestión de piel como signo de auténtica peruanidad. Ya se viene el 2011.

lunes, diciembre 08, 2008

Ignacio Echevarría y el caso García Montero-Fortes


El crítico español Ignacio Echevarría publicó el sábado en su columna de la Revista de Libros del diario El Mercurio un texto titulado "Cultura española" en el que comenta la polémica suscitada en España a propósito del enfrentamiento entre Luis García Montero, "poeta e intelectual emblemático de la socialdemocracia española" y (ex)catedrático de literatura española en la Universidad de Granada, y José Antonio Fortes, "un profesor de su mismo departamento" (autodefinido como "marxista gramsciano"), que condujo el pasado mes de noviembre a una sentencia judicial por injuria contra García Montero. Echevarría, luego de ofrecer su versión de como se vino dando el caso, opina que "la aceptación, por parte de un amplio -y variopinto- sector de la cultura española de las flagrantes tergiversaciones y silenciamientos de los medios hegemónicos de la prensa; su respuesta casi refleja a los llamamientos que la tupida red de amistades de García Montero hizo enseguida para cerrar filas en torno a su persona, dan cuenta del automatismo con que dicha cultura obedece a la imagen que tiene de sí misma: una imagen configurada desde los órganos del poder al que, desde hace casi tres décadas, se halla incondicionalmente aliada. Hace ya mucho que se dijo que la principal consecuencia de la tan celebrada transición española, en el plano cultural, fue el abandono de las posiciones críticas y resistencialistas, y la alianza de los intelectuales, escritores, artistas y agentes culturales con el poder, una alianza sellada por el empeño común de afianzar la democracia. No habían pasado dos años de la primera victoria de los socialistas, en 1982, cuando Rafael Sánchez Ferlosio alertaba de la situación creada -clientelismo y 'populismo elitista'- en un artículo titulado premonitoriamente 'La cultura, ese invento del Gobierno'. Desde entonces, las cosas no han dejado de transcurrir en el sentido denunciado por Ferlosio. Hasta hoy".

En la foto: Luis García Montero aplaudido por los estudiantes de su clase sobre "García Lorca y la generación del 27" en la Universidad de Granada.

domingo, diciembre 07, 2008

Letras con Ángel

Por Rebeca Vaisman*

Este ángel me lo regaló Doris Gibson, cuando gané un concurso hace veinte años. Veintiséis, en realidad, han pasado desde que, en 1982, Edgardo Rivera Martínez (Jauja, 1933) resultara vencedor en la primera edición de El cuento de las mil palabras. "El Ángel de Ocongate" fue la historia que Mario Vargas Llosa y Blanca Varela, entre otros, escogieron como ganadora, y está primera en la antología del concurso que Caretas publicó este año. El ángel de Doris, por otro lado, se encuentra en una de las paredes de la sala del escritor, elevándose a distancia justa por encima de las cabezas.
Diario de Santa María (Alfaguara, 2008) es la novela recientemente publicada por Rivera Martínez, y la que motiva el encuentro frente al mar, en el departamento del autor.
Como en País de Jauja (1993) y Libro del amor y de las profecías (1999), su tierra alberga la historia, que esta vez es de dos muchachas adolescentes, una peruana y la otra francesa, internas en un colegio regentado por monjas: este es, a su vez, escenario para el descubrimiento de la amistad, el amor y el erotismo, en medio del encuentro de dos culturas. "Veo con mucho pesimismo la globalización, el ultraliberalismo, la imposición de los imperialismos. ¿Adónde iremos a dar?", se pregunta Rivera Martínez. "Me preocupa la pérdida de la fisonomía urbana, por ejemplo: de mi tierra, una modesta ciudad a pesar de haber sido la primera capital del Perú, casi no queda nada".
Sin embargo, orgulloso desde la tapa misma del libro, en cuyo diseño intervino, no oculta la satisfacción que le produce tenerlo entre las manos. "Me dio mucho gusto escribir esta novela. Me ha procurado horas muy felices. Curiosamente, en mis novelas predomina la alegría, mientras que algunos de mis cuentos son melancólicos. Sí, esa debe ser la diferencia entre ambas escrituras, pero por qué será, yo no lo sé".
Quién soy sino apagada sombra, en el atrio de una capilla en ruinas, en medio de una puna inmensa. Ciertamente, ese ánimo que atribuye a su producción cuentística se cuela, desde su primera línea, en el texto que envió hace veintiséis años a esta revista. "El cuento de las mil palabras es un desafío", ha dicho antes Rivera Martínez, "es un arte de síntesis, de concentración, de intensidad". Tras ganarlo, y quedar finalista en el prestigioso Rómulo Gallegos, decidió no volver a presentarse a ningún otro, aunque ha sido jurado en varios como el Copé o el de la PUCP. A la luz de estos ejemplos, acusa la falta de interés del Estado, que se refleja en la cancelación de los premios nacionales de estímulo a la cultura. Coyuntura en medio de la cual intelectuales como él han sabido continuar con su trabajo. Felizmente.


* Publicado en Caretas 2056.
En la foto: Edgardo Rivera Martínez. "Veo con mucho pesimismo la globalización, el ultraliberalismo, la imposición de los imperialismos", expresa.

sábado, diciembre 06, 2008

Weblog de Siu Kam Wen


Tierra de nadie es el título del novísimo weblog de Siu Kam Wen, residente en Hawaii. En uno de sus post, el narrador comenta que viene escribiendo una nueva novela, cuyo título es El furor de mis ardores. "Espero completar el libro en otros tres o cuatro meses, optimísticamente. Está basada en un crimen pasional ocurrido aquí en Honolulú veinte años atrás. Es una historia violenta, con dos clímax. Me gusta alternar entre lo autobiográfico y lo no autobiográfico, y después de La vida no es una tómbola, es natural que emprenda algo de esta índole. Los más difíciles capítulos (cinco de un total de ocho) ya han sido escritos", señala el autor. Con relación a La vida no es una tómbola, el Fondo Editorial de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos acaba de publicar la primera edición de dicha novela en el Perú.

PD Domingo 07: El poeta Domingo de Ramos acaba de activar su weblog titulado Dorada Apokalypsis.

En la foto: carátula tentativa de nueva novela de Siu Kam Wen.