zonadenoticias

miércoles, enero 24, 2007

De Argentina a México en Ormeño

En el reciente número de la excelente revista colombiana SoHo (una similar es Don Juan) aparece la primera entrega de una aventurera crónica de tono social de Daniel Riera sobre su experiencia, hasta el momento entre peruanos, en el expreso Ormeño, "el legendario bus peruano que recorre todo el continente", como señala la revista. El viaje inicia en Argentina y culminará en México (es decir, desde el país de residencia de Graciela Goldchluk hasta el país de residencia de Mario Bellatin). Incluyo la parte en la que Riera narra sobre su reciente entrada al Perú: "Superado el inconveniente, el solo hecho de recorrer territorio peruano cambia el ánimo de la mayoría. Por la noche, en la terminal de Tacna cenamos Lomo a la pobreza, un plato gigante con Lomo, arroz, banana frita, ajo, cebolla, ají y alguna otra cosa que me olvido, verdaderamente espectacular, y Pepe orgulloso, me dice has visto que los platos aquí son más sabrosos, compañero, has visto, y orgulloso explica que el Lomo a la pobreza se llama así porque los pobres, justamente, comen mucho. Con el estómago lleno salimos de Tacna. Las dos puertas del bar han sido copadas por vendedores de artículos electrónicos varios, cuyos precios permiten inferir el contrabando. Prácticamente nos atosigan y presuponen que, como viajamos en bus, desfallecemos por discmans, filmadoras, cámaras digitales, relojes. Insisten especialmente con Juan Manuel y conmigo, que lucimos gringos a sus ojos. Mandamos al carajo a un par, pero es como si nada. Nos dicen no se enoje y vuelven a insistir. Por la mañana del último día, el desayuno en Chala no tiene casi ninguna importancia: lo importante es que en esas barracas atroces, donde los inodoros se desagotan a baldazos, hay duchas, de agua fría, sí, pero duchas. Y nos bañamos. Felices. Algunos celebran el acontecimiento clavándose unos pejerreyes fritos que indigestan de solo mirarlos. Falta menos. Nos esperan Nazca, con sus casillas atroces en medio de la arena, Ica, algún policía que sube a pedir pasaportes, y finalmente la llegada a Lima. Mientras su ciudad aparece ante sus ojos, Érika observa todo con una expresión inescrutable. A Juan Manuel se le ocurre preguntarle qué siente al volver después de tanto tiempo. Nada, dice Érika. Nada de nada".
En SoHo aparece a su vez "el mejor cuento de fútbol de todos los tiempos", autoría de Roberto Fontanarrosa.

En la foto: Daniel Riera en la frontera de Chile con el Perú.