zonadenoticias

lunes, setiembre 18, 2006

Madeinusa

Dos notas aparecidas ayer domingo y que se quedaron en el tintero. Una extensa entrevista a página completa de Alberto Servat (quien ¿autocríticamente? se considera parte del sector de peruanos que "sin desdeñarlo, simplemente no le prestamos la atención debida al mundo andino") a Claudia Llosa a propósito del estreno de su película Madeinusa. "Hay una fascinación especial por todo lo iconográfico": "Es increíble. El guion de Madeinusa es larguísimo solo por lo descriptivo que es. Y eso, obviamente, se fue enriqueciendo al 120 por ciento mientras hacíamos la película. Mi formación más que cinematográfica es plástica. Yo no veía cine de chica, iba a galerías de arte. Por eso lo iconográfico es algo inherente a la historia, no lo puedes separar de ella. Y quería enriquecerlo. Hemos dedicado mucho tiempo a detalles que se ven 30 segundos en la pantalla. Pero es importante porque tú sabes que están ahí". "El público probablemente no recuerde cada detalle, pero la película no estaría completa sin cada uno de ellos": "Eso es lo que intuía. Una de las cosas que más he escuchado decir a los cineastas es que tu peor enemigo es el tiempo. Y el tiempo te impide completar los detalles. Y yo suspiro de alegría cuando veo las escenas del filme repletas de los detalles que quise poner. No hay nada allí que esté por azar. Fue un trabajo de equipo con Miguel Rubio, Patricia Bueno y Susana Torres. Es importante estar rodeado de gente que valora tu punto de vista, porque si no lo entiende, entonces no deberían estar allí". "Hay algunos elementos muy visibles. Uno es el reloj. ¿De dónde lo sacaste?": "Es inventado. Crear el reloj fue toda una chamba. En el guion estaba descrito como un señor sentado en una silla y que señalaba el paso del tiempo como en el vóley. Pero no había descrito la caja en forma de cruz ni la manera en que se ponía en funcionamiento. Creamos al relojero con la imagen del ekeko en mente. Queríamos hacerlo más humano, por eso se queda dormido, come, va al baño. Por eso se duerme, porque el tiempo santo debe tener fallas. Y se convirtió en un elemento importantísimo para la historia". "Y llega al delirio cuando se le integra un coro de niñas": "Surgió como una necesidad del guion. Necesitaba que Madeinusa se enterara de que ya había acabado el tiempo santo y la única manera era escuchando al coro que acompaña al relojero. Así, ella ya sabe que está pecando porque se acabó el tiempo santo. Además, quería que se reflejara el aburrimiento de las niñas que cantan. Esos detalles hacen la película. Y los ocho meses que duró la preproducción valieron la pena. Muchas veces me decían que para qué pedía esto o aquello, y me tenía que imponer. Felizmente era productora ejecutiva también. Uno debe tener muy claro lo que quiere".
Por otra parte, ayer en la sección cultural de Correo, Enrique Silva Orrego escribe sobre este filme. "Otra vez el cine peruano vuelve a sorprendernos, al igual que hace dos años con Días de Santiago, de Josué Méndez, cinta muy reconocida a nivel internacional. Ahora estamos frente a Madeinusa, la ópera prima de Claudia Llosa, que también ha recibido algunas distinciones foráneas y acaba de ingresar a la cartelera local. La aventura emprendida por Llosa a partir de una historia original, con cierto fundamento antropológico, es pura y simple ficción. Y vaya que se trata de una ficción bastante peculiar, desde el propio título de la cinta, que es también el nombre de la protagonista", señala Silva Orrego.
PD: Ayer, en la sección cultural de Correo, Olga Rodríguez Ulloa publicó una reseña al libro de cuentos Mujeres a punto de alzar vuelo de Víctor Falcón. "Hay una intención de internarse en la sicología femenina, hay ganas de que los monólogos sean verosímiles y -pese a que sus personajes sólo reproduzcan estereotipos- hay un manejo aceptable del oficio. La narración de Falcón no exaspera, sino que fluye y en muchos casos invita a la sonrisa, al menos a la de medio lado", termina sosteniendo la reseñista.

En la foto: Claudia Llosa (al centro) con Salvador (Carlos de la Torre) y Madeinusa (Magaly Solier).