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domingo, marzo 26, 2006

Polémica del MAC: opina Ramiro Llona

La periodista Catherine Lanseros continúa cubriendo, desde la página cultural del diario La Primera, la polémica suscitada en torno al Museo de Arte Contemporáneo. Esta vez entrevista al pintor Ramiro Llona (ayer Perú 21 había entrevistado a Carlos Revilla). La semana pasada comenté aquí que esta polémica me recordaba a la suscitada entre escritores "andinos" y "criollos". Asociación al parecer inevitable. Precisamente en torno a ello gira la primera pregunta de Lanseros: "¿No se convertirá esto –como ocurrió con los escritores– en un pleito tipo costeños vs. andinos?": "¡No! No es ni costeños versus andinos, ni abstractos contra figurativos o Bellas Artes contra la Católica", afirma rotundamente Llona, a quien algunos círculos artísticos de Lima suelen vocear como el sucesor nacional de Fernando de Szyszlo. "¿Está de acuerdo en arreglar esto poniendo el nombre de Szyszlo a una sala del MAC?", pregunta Lanseros trayendo a colación la propuesta planteada por Carlos Runcie Tanaka en un reportaje previo de la periodista: "No, ¿por qué habría una sala Szyszlo? Entonces hagamos también una para Emilio Rodríguez Larraín, para Eielson, para Humareda ¡Hagamos el museo en el campo de la U! No puede ser… Esto va en una dirección que no es la que los artistas pensábamos, ni la que la ciudad merece". Una pregunta entonces cae por su propio peso: "¿Cómo solucionar todo para que el MAC no termine como un cementerio de fierros?". A lo que Llona responde: "El problema es que con el silencio del patronato y la actitud de ofensa de Szyszlo, esto se convierte en un asunto de 'o hacemos esto, o no hacemos nada'. Es como entrar a la segunda vuelta y escoger entre el menos malo de los candidatos. Hay que insistir en que abran el proyecto y lo lleven en la dirección inicial". Es decir, ¿preguntarse en qué acabará todo esto es igual a preguntarse en qué acabará la segunda vuelta electoral?

En la foto: Ramiro Llona afirma que "cuando se hizo la subasta tuve mi primera gran sospecha, porque en la cubierta del catálogo pusieron la reproducción de un cuadro de Szyszlo".